Si tus sueños son lo suficientemente poderosos y la intensidad de tu deseo por cumplirlos es constante, entonces déjame decirte que la felicidad y el éxito siempre te acompañarán... ¡Nunca te rindas! y recuerda que no existen los imposibles... ¡Estos solo son una ilusión de nuestra mente!

sábado, 21 de junio de 2008

La Gerencia y la Administración del Tiempo


¿Cuantas veces escuchó a un gerente quejarse o justificarse porque no le alcanzó el tiempo para realizar aquellas actividades que tenía previstas? o bien ¿Cuantas veces lo escuchó decir que no sabe como administrar su tiempo y verse favorecido en su rol?


Lo cierto es que, muchas actividades gerenciales no alcanzan los resultados previstos porque la gerencia simplemente no ha percibido la importancia que este recurso intangible, reviste tanto para su personal como para si mismo.


Desperdiciar el tiempo, como decíamos anteriormente, redunda en altos costos, resultados desfavorables y elevado estrés.


Por esto, la administración del tiempo debe ser conceptuada como una manera de ser y una forma de vivir. Hoy, se puede considerar al tiempo como uno de los recursos más importantes y críticos de los ejecutivos.


Los problemas mas comunes que tienen la mayoría de los ejecutivos para administrar su tiempo son:


• Los estimados de tiempo que suponen van a necesitar para una actividad, para transportarse, para resolver situaciones o tomar decisiones, son irreales y son parte de los desperdiciadores de tiempo más comunes.


• La escasez del tiempo generalmente resulta de una mala administración o una carga de trabajo mal planeada y distribuida.


• Es frecuente que trate de hacer demasiado en un tiempo muy corto.


• También sucede que algunos ejecutivos no saben decir “no” a las distracciones externas.


• Confunden prioridades trabajando en cosas de segunda o tercera importancia dejando lo urgente para después.


• Se establecen metas diarias muy por encima de la capacidad de cumplirlas.


• Dejan las anotaciones del registro de como se va utilizar el tiempo para el final del día o cuando haya un momento oportuno, lo cuál no es funcional ni realista, ya que la memoria puede fallar, con la gra cantidad de compromisos e información que manejan.


• No se preocupan por registrar los compromisos y actividades, lo que impide administrar eficientemente el tiempo. Generalmente llegan tarde a las reuniones y en situaciones adversas puede producir crisis innecesarias.


• La falta de la planeación del tiempo, en muchos casos, limita la posibilidad de generar alternativas de soluciones factibles y la posibilidad de seleccionar la vía de acción más efectiva.


• Algunos ejecutivos se oponen al registro y control del tiempo, ya que lo consideran como una amenaza o se sienten inseguros porque nunca lo han intentado.


PARA TENER EN CUENTA

1) Una técnica recomendable para administrar mejor el tiempo, es utilizar los últimos 20 minutos de labores, en planear el día siguiente. El tiempo del ejecutivo rara vez se utiliza exactamente como él lo planea. Pero se debe procurar, dentro de lo posible, respetar las actividades y compromisos establecidos.


2) Los resultados más efectivos se logran teniendo objetivos y programas planeados.


3) El tiempo disponible debe ser asignado a tareas en orden de prioridad, o sea que los ejecutivos deben utilizar su tiempo en relación a la importancia de sus actividades.


4) El establecer un determinado tiempo o fechas limites para cumplir con los compromisos de los ejecutivos, ayuda al resto del grupo de trabajo a sobreponerse a la indecisión y a la tardanza.


5) Evitar perder de vista los objetivos o los resultados esperados y concentrar los esfuerzos en cada actividad.


6) No confundir movimientos con realizaciones y actividades o acciones con resultados.


7) El tiempo utilizado en dar respuesta a problemas que surgen debe ser realista y limitado a las necesidades de cada situación en particular, ignorando aquellos problemas que tienden a resolverse por sí mismos lo que puede ahorrar mucho tiempo.


8) Posponer o aplazar la toma de decisiones puede convertirse en hábito que desperdicia tiempo, se pierden las oportunidades y aumenta la presión de las fechas límite establecidas.


9) Las actividades de rutina de bajo valor para el logro de los objetivos generales deben ser delegadas o eliminadas en la medidad de lo posible.


10) Las actividades similares se deben agrupar para eliminar la repetición de acciones y reducir las interrupciones a un mínimo como contestar o hacer llamadas telefónicas.


11) El mantener a la vista la agenda del día facilita el administrar correctamente el tiempo.


12) El registro de como se piensa utilizar el tiempo en el día, en la semana o en el mes debe ser detallado, ya que omitir detalles es tan perjudicial para los objetivos del registro del tiempo, como confiar en la memoria o establecer metas irreales.